22.9.08

noticias de ayer

En las paredes del lugar hay una foto de Julio Lopez (yo le puse un sello con el nombre de mi jefa en la frente); un mapa gigante de la ciudad; papeles y carpetas en los estantes, cajas rojas y cajas azules.
Hay una mujer de barrio, preciosa y lejana.

En todos lados hay un monstruo gigante de color Durlock. Una PC que se consume el tiempo de la manera màs abusiva posible.

En mi cama conviven las flores negras y las bordòs. No duermo aquì.

Despierto.

En las paredes hay manchas de humedad. Un ropero prestado y maderas sin teñir. Abajo mìo.
Un zoòlogico con nombre de mujer. Mierda en el patio. La radio Yapeyù toca todo el tiempo el mismo disco; ese de you`re big girl now.
Shelter from the storm y Si la ves dile Hola.

El random tiene un telefono sòlo. Anoche sonò la voz del pasado.
Tengo el recuerdo de los soldados cuando no decìan Cursos Acelerados de Guerrila o Pasiòn dos veces, sino que decìan luego No Me Va a Conformar Ser La Voz del Pasado.

¿No querès seguir conmigo y coger con otros cada tanto?

Duermo y despierto temprano, revuelto en precipitaciones.
En el gusto del alcohol amargo de anoche.
Anoche no bebì -pienso al instante- anoche no bebì màs que picantes làgrimas de sal.

Amanecer de 6 cuerdas elèctricas. Planos interminables de un grueso popurrì en Fa.
Un favor que nunca terminò de llegar. Bebì tu pis real.
¿Para què si ni asì me dijiste nada?
¿Por què si lucìa en el cielo se llevò dos diamantes?

La siesta tiene que tener 8 minutos. El sexo 14.
Cada llamado 15 segundos. Un viaje 5 horas.
La mujer tiene que representar un desafìo. Mi esposa es un proyecto.

La PC te consume todo el tiempo. Chateo con Julio Lopez.
Tiene a mis jefes en su frente. En la mira.
Con la mira ajustada.

Yo veo las cartas quemarse y no pienso hacer nada; no pienso mover un dedo màs por nadie; tomè el tren hacia el sur, allà me fue bien; compramos dulce de leche.
Despierto precipitado:
Alguien llora ahì.
Alguien me necesita.