30.3.10

atellier

Tengo un taller bajo tierra. Lo construì con una indemnizaciòn fraguada que me regalò un amigo abogado.
No es la gran cosa. Tengo 2 placas de rayos x para hacer radiografìas de lo que me gusta. En general utilizo mascotas y gente comùn.
Me interesan las personas.

En un estante recopilo muestras de cabello y uñas de los pies.
Las uso para futuras obras de arte que una compañera quiere hacer.
Dice que van a valer millones. El truco es que cuando logro que alguien baje al sòtano le explico que para hacerse la radiografìa de pie (una de mis colecciones preferidas) debe cortarse primero las uñas.

Es todo un rollo, hay gente que està tan pancha que no quiere. Pero muchas veces lo logro y les acerco el alicate. Cuando ven que van a hacer un desastre yo ya tengo todo pensado; tengo un tachito especial para eso.
Asi que lo que parece un tacho de basura normal es un juntadero de uñas de pies. Despuès tengo el tacho de verdad donde tiro las porquerìas.

El pelo es màs fàcil porque todos los españoles, judìos e italianos pierden cabello. Asì que dejo que queden algunas horas y cuando se van prendo la luz negra incandecente de lisfofato (que es maravillosa y leì por ahì que la inventò Roberto Arlt) y ahì estàn. Se ven. Juro que se ven los pelos que la gente pierde.

Tengo debilidad por las canas. Es algo especial.
Una cana vale por mil pelos.

Generalmente paso los dìas arriba y las noches abajo. Me cuestan especialmente las mañanas. Es un momento donde nunca hay mucho para hacer.
La otra vez tuve que salir corriendo al supermercado. Y fui al màs lejano.
Fui lejos porque queria caminar y pensar y no hacer nada.

Lleguè y no tenìa nada que comprar, la verdad. Es todo muy caro, habria que matarlos a todos.
A la cajera, al repositor de dentrìficos.
Son unos pelotudos.

Asì que me dì vuelta y me fui. No sè bien si son las multinacionales o què carajo.

En casa pude empezar a revelar algunas radios viejas.
No sè bien que harè con tantos recuerdos en fìlmico.
Pero no me preocupa. Creo que hay cosas mucho peores en la vida que saber què hacer con un hobby. El mal de amores dicen que mata. No tener dinero me aterra pero es casi imposible.

Tengo miles de cuadernos escritos por distintos hombres que fui.
Cuando estaba allà, cuando estuve acà, antes de la muerte del tìo y cuando mi hermana tuvo que abortar y decidimos venderle la moto para castigarla.
A mi me pareciò una locura, suficiente castigo esto del aborto. Tuvo mala suerte.
Un accidente le pasa a cualquiera. Una intervenciòn quirùrjica es suficiente marca.

La suerte està de mi lado: nunca entrè a un quiròfano.

Papà y mamà no se llevan bien hace tiempo. En Estados Unidos el divorcio es un tema nacional. Parece que muchos asesinos seriales son asesinos seriales porque sus padres se divorciaron.
Yo preferì cuando se divorciaron. Era medio molesto todo ya. Platos rotos, mucha bebida, al pedo.
Pero podrìan llevarse mejor de lejos. Quièn sabe.
Supongo que con cualquier persona con la que tuviste un vìnculo y amor y todo eso de convivir o pasar tiempo tendrìa que quedar una relaciòn buena y de cariño.
Pero ellos se llevan mal.

En esa època pensè en dejar lo de los rayos x.
Pero despuès me enamorè de la pràctica. Me dì cuenta que es lindo hacer radiografìas de personas y animales. Con los perros tengo grandes planes. Pero me enseñaron dos cosas: que las ideas es mejor tenerlas listas antes de hablar y que los grandes planes suceden solos.

Hoy es un dìa especial, por algùn motivo.
Tengo fè, especialmente en el zoodiaco. Aùn cuando lo leo y veo que se viene todo para abajo. Y que hay un tema de un rockero que dice que cuando el mundo tira para abajo es mejor no estar atado a nada.

Yo tengo ahì mis planchas de rayos x.