a veinte millones de palabras
de la paz.
lejos de tu casa
donda nadie hace nada
y mira por el satelite
entre las comidas
y el sueño.
en una de esas,
no soy de madera
como ellas
y parezco màs
a la chica tonta del mono
la rubia del canal
que tantos regalos le traìa
hice un bote para que vengas a buscar
y todo lo que trae la noche
es casi como la ansiedad
guardada en un frasco
de vidrio chiquito
donde entran pocas cosas
y si pongo de màs
estalla. otra vez